Aumento de mamas

Redefinir con armonía y equilibrio

Cirugía de aumento de mamas

El aumento de mama es uno de los procedimientos más realizados en cirugía plástica a nivel mundial y uno de los que ofrece mayor satisfacción a las pacientes. En HC Aesthetic lo abordamos siempre pensando en cada paciente, entendiendo que cada mujer tiene una motivación distinta: algunas desean mejorar la proporción corporal, otras recuperar el volumen perdido tras embarazos o pérdidas de peso, y otras corregir una asimetría evidente.

Más allá del volumen, nuestra prioridad es conseguir un pecho natural y en armonía con el resto del cuerpo, manteniendo siempre la máxima seguridad y un resultado estable a largo plazo.

El aumento de mama está indicado en diversas situaciones en las que el volumen, la forma o la simetría del pecho nunca se desarrollaron o han cambiado.

Una cirugía pensada para ti

En la primera visita (gratuita) dedicamos el tiempo necesario a comprender tu caso en profundidad; evaluando no solo la anatomía, sino también tus expectativas, tu estilo de vida y lo que deseas conseguir.

Historia clínica y expectativas

Conocer tu estado de salud, tus hábitos y lo que buscas conseguir.

Exploración física

Mediciones precisas, análisis de la forma del tórax, calidad de la piel y cobertura de tejidos.

Elección de implante ideal

En la gran mayoría de casos utilizamos prótesis ergonómicas por sus ventajas estéticas y de biocompatibilidad.

Prótesis ergonómicas

Nuestras prótesis ergonómicas combinan las ventajas de las prótesis redondas y las anatómicas gracias a su gel cohesivo.

Resultado de pie

Ofrece una caída natural y una silueta anatómica, manteniendo un aspecto armónico y proporcionado.

Resultado tumbada

Proporciona redondez y mayor plenitud en el polo superior, creando un escote más definido y atractivo.

Alta biocompatibilidad

Reduce el riesgo de contractura capsular y garantiza un tacto muy similar al del tejido mamario natural.

Colocación del implante mamario

La selección del plano es clave para el resultado y se decide en función de las características de cada paciente:

    • Plano prepectoral: recomendado cuando hay suficiente tejido y grasa para cubrir el implante. Evita la manipulación del músculo, facilita una recuperación más rápida y reduce el dolor postoperatorio.
    • Plano dual: indicado en pacientes con poca cobertura en el polo superior o que desean un aumento más marcado, con prótesis de mayor volumen. Combina colocación parcial bajo el músculo pectoral y subglandular en la parte inferior, ofreciendo más naturalidad y menor riesgo de visibilidad del implante (rippling).

Qué esperar tras la cirugía de aumento mamario

Todo lo que necesitas saber sobre tu recuperación, la evolución del resultado y posibles consideraciones.

    • Ingreso hospitalario: normalmente no se requiere de ingreso hospitalario, aunque algunas pacientes prefieren pasar la primera noche en el hospital.
    • Sin drenajes.
    • Molestias: controladas con analgésicos comunes por vía oral. Sensación de tirantez es normal los primeros días.
    • Vida laboral: incorporación de 3 a 14 días, según actividad.
    • Ejercicio: evitar esfuerzos intensos de 4 a 6 semanas.
    • Sujetador postoperatorio: uso continuado durante el primer mes.
    • Revisiones periódicas para asegurar una evolución adecuada.
    • Resultados visibles al instante, aunque la forma definitiva se aprecia a partir de los 3-6 meses.
    • El implante se “asienta” progresivamente y el edema desaparece.
    • Durabilidad alta, aunque pueden requerirse revisiones o recambio con el paso de los años.

Aunque es poco frecuente, es importante saber que tras la operación pueden aparecer:

    • Hematomas y seromas.
    • Alteraciones temporales de la sensibilidad.
    • Contractura capsular.
    • Asimetrías o desplazamiento del implante.
    • Necesidad de cirugías adicionales a largo plazo.

Otros tipos de cirugías de aumento de mamas

Además del aumento con implantes, existen otras opciones que pueden ser adecuadas según las características y objetivos de cada paciente.

El aumento mamario con grasa propia es una técnica en la que se extrae grasa de zonas donde sobra (abdomen, flancos, muslos, cartucheras…) mediante liposucción suave, se procesa y se inyecta en la mama para aumentar su volumen y mejorar su forma.

Es una opción ideal para pacientes que:

    • Quieren un aumento moderado (habitualmente hasta una talla más).
    • Prefieren evitar el uso de implantes.
    • Desean corregir pequeñas asimetrías o secuelas de cirugías previas.
    • Buscan mejorar el aspecto del escote o rellenar zonas específicas de la mama.

Además, al extraer la grasa para el lipofilling, se esculpen zonas que suelen ser motivo de consulta estética (abdomen, cintura, caderas, muslos). Esto permite un doble resultado: remodelación corporal y aumento mamario natural.

En cuanto a la recuperación, suele ser rápida y bien tolerada. Es habitual experimentar molestias leves tanto en las zonas donantes como en las mamas, compatibles con una incorporación laboral en pocos días. Se recomienda utilizar una faja de compresión en las áreas liposuccionadas durante 3–4 semanas para optimizar el resultado y favorecer la evolución del tejido.

Ventajas

  • Resultado natural al tacto y a la vista.
  • Sin riesgo de rotura o contractura capsular.
  • Mejora de la silueta corporal gracias a la liposucción asociada.
  • Posibilidad de repetir el procedimiento.

Limitaciones

  • Aumento limitado: no es adecuado para pacientes que buscan un volumen grande.
  • Parte de la grasa injertada (20-40%) se reabsorbe en los primeros meses.
  • Requiere que la paciente disponga de grasa suficiente para extraer.

Ventajas

  • Cobertura adicional sobre el implante, lo que lo hace menos visible o palpable.
  • Escote más suave y natural.
  • Remodelación corporal gracias a la liposucción.

Limitaciones

  • Cirugía más larga y algo más compleja que un aumento solo con implantes.
  • Reabsorción parcial de la grasa inyectada.

Aumento mamario híbrido (implantes + grasa)

El aumento híbrido combina la colocación de implantes con injertos de grasa propia. Esta técnica permite aprovechar lo mejor de ambos mundos:

    • El implante aporta volumen, proyección y durabilidad.
    • La grasa suaviza bordes, mejora la transición con el tórax y da un tacto más natural.

Este tipo de cirugías se indica cuando en:

    • Pacientes muy delgadas con poca cobertura de tejido mamario.
    • Casos en los que se busca un escote más lleno y natural.
    • Corrección de irregularidades o asimetrías tras cirugías previas.
    • Aumentos con implantes grandes donde se quiere evitar un aspecto artificial.

La recuperación es muy similar a la del aumento con implantes, aunque puede haber algo de inflamación en las zonas donantes de grasa. Durante este periodo, se recomienda utilizar un sujetador postoperatorio y una faja en las áreas liposuccionadas.

Da el siguiente paso hacia tu mejor versión

Cada cambio comienza con una decisión. Regálate el cuidado que mereces y descubre cómo la ciencia, la innovación y la atención personalizada pueden transformar tu bienestar.

    Preguntas frecuentes sobre la cirugía de aumento de mamas

    Respondemos las preguntas más habituales que nos plantean en consulta, para ayudarte a resolver tus dudas.

    Las prótesis actuales están diseñadas para tener gran durabilidad, con materiales de alta resistencia y gel cohesivo. No existe una “fecha de caducidad” fija, pero sí es recomendable un control clínico y de imagen cada cierto tiempo para detectar precozmente cualquier cambio.

    El recambio se plantea solo si hay complicaciones (rotura, contractura capsular, desplazamiento) o si la paciente desea modificar el volumen o forma.

    En la cirugía de aumento mamario buscamos que las cicatrices sean lo más discretas posible. Las ubicaciones más habituales son:

      • Surco submamario: oculta en el pliegue natural bajo el pecho.
      • Periareolar: disimulada en el cambio de color entre la piel y la areola.
      • Axilar: en la línea natural de la axila (menos frecuente).

    Al inicio, la cicatriz tiene un aspecto más rosado o ligeramente inflamado, pero con el paso de los meses se aclara y se integra con el tono de la piel circundante. El proceso de maduración suele durar entre 6 y 12 meses.

    Además, cuidamos de la cicatriz desde el primer momento:

      • Cierre quirúrgico meticuloso para reducir la tensión sobre la piel.
      • Apósitos de silicona y cremas específicas para mejorar la evolución.
      • Recomendaciones sobre fotoprotección estricta durante el primer año.

    En la gran mayoría de pacientes, las cicatrices se vuelven prácticamente imperceptibles y no suponen una limitación estética significativa.

    En la amplia mayoría de los casos sí, ya que la glándula no se ve alterada.

    Sin embargo, si la cirugía se combina con otras técnicas como mastopexia o reducción, la capacidad de lactancia puede verse más comprometida y debe evaluarse individualmente.

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    Cada detalle refleja nuestro compromiso con la excelencia, la seguridad y la profesionalidad. En HC Aesthetic, la atención exclusiva y personalizada transforma cada tratamiento en una experiencia única

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